S
Sindrome del impostor
En 1978, Pauline Clans percibió que muchas de sus estudiantes en la Universidad temían ser descubiertas. Decían que no merecían ese éxito que habían logrado. En su investigación concluyó que la gran mayoría desconfiaba de sí mismas, que pensaban que su éxito había sido un fraude, y lo denominó el síndrome del impostor.
¿Qué es?
¿Te has puesto alguna indumentaria que te haga parecer más inteligente o más mayor o más joven? Unas gafas, un tipo de ropa, una forma de hablar. Incluso a veces puedes estar convencida de que las personas van a adivinar tus intenciones y se va a dar cuenta de que no sabes lo que estás hablando.
El síndrome del impostor se trata de aquellas de personas en las que asumen que su éxito en la vida personal o profesional, es cuestión de suerte. “Yo justo estaba en este momento adecuado. Justo me tocó a mí”.
Estás personas sienten un continuo estrés, ansiedad, incluso teniendo que hacer conductas que no quieren o mostrarse de alguna forma. Sienten la necesidad de mostrar esa inteligencia continuamente porque si no las iban a descubrir.
¿Qué consecuencias tiene?
Es agotador y frustrante para la persona, ya que, tiene que vivir con ese rol de “tengo que aparentar algo”. De hecho, hay personas que tienen un trabajo muy deseado, que lo han deseado siempre, pero por sentirse así lo acaban dejando debido a ese sentimiento de tener que estar fingiendo. Es frustrante y agotador. Además, muchos estudios han demostrado que puede afectar a la productividad, debido a este componente agotador.
¿Es una enfermedad?
- Es un nombre que se le puse en 1978 a un tipo de síntomas, pero no es una enfermedad, no es un trastorno y no es patológico.
Si no es una enfermedad, ¿Cual es el problema?
Todos en algún momento queremos ser el mejor o la mejor en algo, o queremos que se nos de bien. Y por supuesto, alguna vez hemos dudado de nosotros. El problema es cuando eso se lleva al extremo y entonces, empezamos a tener esa presión sobre si lo estoy haciendo bien.
¿Como trabajarlo?
- Darte valor a ti mismo
Para mí es importante que la persona se de cuenta dónde esta poniendo su valor.
¿Estoy poniendo mi valor en mí o estoy poniendo mi valor en algo exterior? A veces le damos el valor a lo externo.
“yo soy mejor si me dan este título, si me cogen en esta universidad, si me dan este trabajo, si no sé quién me dice que muy bien, si no sé qué me dice que es muy mal, entonces mal”.
- El objetivo es poder retribuir ese poder al interior. Autoapoyarte tu mismo.
El síndrome de impostor viene porque la mirada está puesta en el otro, en cómo me va a mirar el otro, si el otro me apoya o no. Si el otro me ve bien o no, pero si yo cambio la mirada, me veo a mí.
¿Cómo me veo yo? ¿Como me sostengo yo? ¿que es importante para mí? ¿Qué haría si no pensara en el otro?
Una idea podría ser hacer una lista de tus fortalezas y debilidades.
Si te interesa saber más, te dejo aquí el podcast (también disponible en Spotify)
¡Hola! Soy Myriam Oliver, psicóloga, coach y doctora en neurociencia cognitiva. Creo firmemente en el potencial de cada persona, y como cada uno de nosotros podemos rediseñar todos los aspectos que deseemos de nuestras vidas. ¡Estoy aquí para demostrártelo!
¿Quieres contactar conmigo? info@myriamoliver.com
Sindrome del impostor
En 1978, Pauline Clans percibió que muchas de sus estudiantes en la Universidad temían ser descubiertas. Decían que no merecían ese éxito que habían logrado. En su investigación concluyó que la gran mayoría desconfiaba de sí mismas, que pensaban que su éxito había sido un fraude, y lo denominó el síndrome del impostor.
¿Qué es?
¿Te has puesto alguna indumentaria que te haga parecer más inteligente o más mayor o más joven? Unas gafas, un tipo de ropa, una forma de hablar. Incluso a veces puedes estar convencida de que las personas van a adivinar tus intenciones y se va a dar cuenta de que no sabes lo que estás hablando.
El síndrome del impostor se trata de aquellas de personas en las que asumen que su éxito en la vida personal o profesional, es cuestión de suerte. “Yo justo estaba en este momento adecuado. Justo me tocó a mí”.
Estás personas sienten un continuo estrés, ansiedad, incluso teniendo que hacer conductas que no quieren o mostrarse de alguna forma. Sienten la necesidad de mostrar esa inteligencia continuamente porque si no las iban a descubrir.
¿Qué consecuencias tiene?
Es agotador y frustrante para la persona, ya que, tiene que vivir con ese rol de “tengo que aparentar algo”. De hecho, hay personas que tienen un trabajo muy deseado, que lo han deseado siempre, pero por sentirse así lo acaban dejando debido a ese sentimiento de tener que estar fingiendo. Es frustrante y agotador. Además, muchos estudios han demostrado que puede afectar a la productividad, debido a este componente agotador.
¿Es una enfermedad?
- Es un nombre que se le puse en 1978 a un tipo de síntomas, pero no es una enfermedad, no es un trastorno y no es patológico.
Si no es una enfermedad, ¿Cual es el problema?
Todos en algún momento queremos ser el mejor o la mejor en algo, o queremos que se nos de bien. Y por supuesto, alguna vez hemos dudado de nosotros. El problema es cuando eso se lleva al extremo y entonces, empezamos a tener esa presión sobre si lo estoy haciendo bien.
¿Como trabajarlo?
- Darte valor a ti mismo
Para mí es importante que la persona se de cuenta dónde esta poniendo su valor.
¿Estoy poniendo mi valor en mí o estoy poniendo mi valor en algo exterior? A veces le damos el valor a lo externo.
“yo soy mejor si me dan este título, si me cogen en esta universidad, si me dan este trabajo, si no sé quién me dice que muy bien, si no sé qué me dice que es muy mal, entonces mal”.
- El objetivo es poder retribuir ese poder al interior. Autoapoyarte tu mismo.
El síndrome de impostor viene porque la mirada está puesta en el otro, en cómo me va a mirar el otro, si el otro me apoya o no. Si el otro me ve bien o no, pero si yo cambio la mirada, me veo a mí.
¿Cómo me veo yo? ¿Como me sostengo yo? ¿que es importante para mí? ¿Qué haría si no pensara en el otro?
Una idea podría ser hacer una lista de tus fortalezas y debilidades.
Si te interesa saber más, te dejo aquí el podcast (también disponible en Spotify):
¡Hola! Soy Myriam Oliver, psicóloga, coach y doctora en neurociencia cognitiva. Creo firmemente en el potencial de cada persona, y como cada uno de nosotros podemos rediseñar todos los aspectos que deseemos de nuestras vidas. ¡Estoy aquí para demostrártelo!
¿Quieres contactar conmigo?